Con la ceremonia del cambio de Guardia de Honor en el sendero de los Padres Fundadores de la Nación, en el Cementerio Patrimonial Santa Ifigenia, se inició el tributo.
Seguidamente el depósito de flores ante el monolito que atesora las cenizas del Comandante en Jefe.
Encabezaron los honores Teresa Amarelle, miembro del Consejo de Estado y del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Secretaria General de la Federación de Mujeres Cubanas, José Ramón Monteagudo, miembro del Comité Central del PCC y primer secretario en la provincia de Santiago de Cuba, y el Héroe del Trabajo de la República de Cuba, Lázaro Expósito Canto.
También llevaron rosas a Fidel sus familiares, niños, jóvenes, trabajadores y Combatientes de la Revolución Cubana.
En este Altar sagrado, las manifestaciones de tributo estuvieron matizadas por lágrimas y regocijo; cubanos de todas las edades, profesiones, razas y sexos mostraron el agradecimiento imperecedero Fidel, cuyas cenizas se atesoran muy cerca de José Martí y de Carlos Manuel de Céspedes y Mariana Grajales, Padre y Madre de la Patria, respectivamente.
En la Ciudad Héroe y el resto de los municipios de la provincia se desarrollarán actos similares, en los que será ratificado el compromiso con su legado, la Revolución y el Socialismo.