
Indira Ferrer Alonso
“El día que un médico no tema perder un paciente, el día que no le entristezca la muerte de un paciente y no esté dispuesto a cualquier sacrificio por evitarla, que deje la bata blanca. Los que estamos aquí, sabemos que solo la alegría de salvar una vida puede compensar el sacrificio que demanda nuestra profesión”, con esas palabras la doctora Yasnalla Jiménez Pérez, especialista en Medicina Intensiva y Emergencias, definió la premisa del equipo de trabajo de la unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General Dr. Juan Bruno Zayas Alfonso, en Santiago de Cuba.
La promoción de salud centró las actividades por el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, celebradas la víspera en Santiago de Cuba.
Con una gala politico-cultural cargada de emociones, se celebró la víspera, en Santiago de Cuba, el Día de la Medicina Latinoamericana; ocasión propicia para reconocer a profesionales e instituciones de la Salud.
Abrasaba el sol vespertino y la juventud santiaguera colmaba las calles aledañas al Bosque de los Héroes, en esta ciudad. A menos de un kilómetro de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba y de la sede Julio Antonio Mella de la Universidad de Oriente, se dieron cita para marchar junto a las máximas autoridades de la provincia y a sus profesores, miles de muchachos y muchachas portando carteles, banderas y las fotos de los ocho estudiantes de Medicina fusilados en La Habana, el aciago 27
de noviembre de 1871.
Más de medio siglo de ejercicio en los servicios farmacéuticos atesora Rosa Victoria Miguel Vázquez, una mujer que se ha convertido en paradigma para generaciones de profesionales del ramo en Santiago de Cuba, y cuyo nombre ha sido recurrente en el contexto de la celebración por el Día del Farmacéutico Cubano, celebrado el 22 de noviembre.