Es hora de enfocarse más en “cortarle las alas” al Aedes, peligroso mosquito que sigue vivo y multiplicándose en los sitios donde le “permitimos” poner sus huevos, y si no lo detenemos a tiempo ganará más terreno.
Aplicar medidas de prevención como el cepillado de los depósitos, el tapado hermético de los mismos y la eliminación de posibles criaderos, junto a la colaboración con los operarios de la campaña para la inspección, abatización y fumigación de las viviendas, bastaría para reducir los índices de infestación del Aedes en el municipio.
Urge que junto a la Campaña Antivectorial para la vigilancia y control del alado, se realicen acciones domiciliares para evitar que el vector encuentre sitio para desarrollarse y luego volar.