Previo a la presentación, la cantante habanera que descolló en la interpretación de música campesina expresó que está feliz de estar aquí, por primera vez en el Festival Jazz Plaza, aunque ha visitado Santiago en otras ocasiones y que se siente fascinada por la acogida que le dieron, por el cariño y la hospitalidad que caracteriza al pueblo.
Insistió en que los habitantes de la más caribeña de las ciudades de Cuban han tomado el festival internacional Jazz Plaza como una parte de la vida cultural de la ciudad, “por lo que ya es suyo y no solamente de La Habana”, y ponderó la importancia de que este evento musical llegara hasta aquí.
Acotó que Santiago de Cuba es una fuente inagotable de música, de compositores, de buenos artistas y su pueblo sabe apreciarlo, por lo que no se podía quedar atrás en un evento tan importante para el país y la cultura cubana.
María Victoria reconoció que sus visitas a Santiago siempre son como la primera vez, porque le gustan sus calles y su gente, recordó con cariño que un día fue reconocida gracias su collar, cuando aún no gozaba de tanta popularidad, aclaró con humildad.
Concluyó que en esa ocasión recibió un regalo muy preciado para ella, una Guayabera marrón que aún conserva con mucho cariño, “ya me queda apretadita, pero la use hace algunos domingos, fue la primera pieza de ese tipo que tuve; Santiago para mí tiene un significado especial amo esta tierra como propia.