Las acciones están dirigidas a elevar el potencial tecnológico y lograr la participación cohesionada, profesional y ética, comprometida con el desarrollo sostenible, especialmente cuando este 1 de julio se celebra el Día del Trabajador Petrolero.

En Santiago de Cuba el colectivo de la División Territorial de Comercialización de Combustibles trabaja por el cumplimiento del plan de producción, la calidad en la prestación de servicios y la formación de las generaciones más jóvenes. A propósito de la fecha, Sierra Maestra conversó con algunos de sus empleados sobre los desafíos actuales. 

Transportación con seguridad

Como entidad comercializadora, la trasportación constituye uno de los pilares. Para Henry de Jesús Hechavarría Ramírez,  Especialista de Transporte, la institución le ha abierto las puertas y en ella se ha formado por cuatro años, en la que  ha adquirido conocimiento y experiencia desde su salida de la Universidad como Ingeniero mecánico.

“Siempre he tenido claro la importancia de hacerle llegar el combustible a la población para la cocción de los alimentos, además de transportar los combustibles líquidos hacia los servicentros y otras empresas que los consumen. Somos estratégicos en el país por la tarea que se realizamos.

“El control es fundamental. Sabemos que Cuba atraviesa una crisis energética, por eso se potencia la vigilancia.

“Nos acogemos a una norma que establece el consumo por período, se calcula la carga de combustible ajustada según el trabajo que vaya a realizar y se tiene en cuenta el peso y la distancia a recorrer para contribuir a un ahorro energético en el consumo de combustible,  en este caso mayormente es diésel, que es lo que usan los equipos pesados de transportación.

“También se planifican los viajes cuando se lleva kerosina o alcohol a lugares intrincados de los municipios. Cada mes se analiza cómo se comportaron los índices de consumo, si hubo algún problema, y se lleva a cabo cualquier reparación en nuestro taller de ser necesario para evitar el sobreconsumo”.

Pero la comercializadora Cupet no solo abastece a la provincia Santiago de Cuba, también llega a Guantánamo, Holguín y Granma a través de las vías férreas. Precisamente en la Terminal Ferroviaria General de División Senen Casas Regueiro se encuentra, desde el 2013, una entidad clave en la distribución del crudo, la conocida Ruta del diésel.

Organizados en cuatro brigadas, hombres como Rouchelmi Cabrales García y Yaser Morales Igarza, Técnicos de Seguridad y Protección, están encargados de cuidar el combustible en la travesía hacia sus destinos.

“Por la situación que hoy estamos atravesando enviamos compañeros a esperar el combustible que viene desde Ciego de Ávila y lo esperamos en Camagüey. Es una responsabilidad grande la que tiene la unidad. Cualquier fallo, como un mal llenado, afectaría a la provincia, y para evitarlo estamos aquí”, aseguró Rouchelmi Cabrales, quien trabaja en el área hace cinco años. 

“Son turnos de 24 horas pero todo depende de los horarios del tren.  Gracias a las buenas relaciones de trabajo con los compañeros de ferrocarriles y de las otras provincias el retorno es más fácil, especialmente durante la Covid-19”.

Yaser Morales, jefe de brigada, afirma que cuentan con un colectivo bastante joven que ha asumido la responsabilidad del riesgo que implica su labor. “Todos sabemos la importancia que requiere, más en los momentos actuales, el combustible, por eso hay que estar alerta desde que uno se monta en el tren hasta que regresa. 

“A los más jóvenes se les adiestra llevándoles al patio de carga en la Refinería Hermanos Díaz. Desde que se llenan los carros ellos están al pendiente de que se le dé el tiempo de reposo establecido y llevan un control del sellado. Ese combustible nunca está solo desde que sale hasta que se deposita en los diferentes destinos.

“Nosotros, que pasamos los cuarenta, por problemas de salud y por los conocimientos, estamos en puestos de supervisión; los jóvenes sí están de frente a la pelea en la línea.

 “Desde que se creó esta plaza en el 2013 por estadísticas se ha visto un alto índice de ahorro. Antes el combustible llegaba con faltantes, se perdía en el camino porque no había un responsable. Ahora si hay algún faltante es porque realmente la temperatura dilata el crudo, a veces el combustible cuando cae en reposo baja demasiado, pero cuando se lleva a las tablas las medidas establecidas están dentro del parámetro”.

Formando para el futuro

La División de Cupet en la provincia tiene un  programa de atención a los jóvenes que inicia con un proceso de captación desde que están en cuarto y quinto año de la carrera. Siendo trabajadores se les inserta en la preparación de cuadros, se seleccionan los que se interesan por la actividad petrolera, industrial y se le involucra en actividades recreativas, culturales y de impacto social.

Al cumplir el plan de adiestramiento y, atendiendo a las habilidades demostradas, se les tiene en cuenta en la promoción a plazas de alto nivel de responsabilidad, como son las de especialistas. Así fue para José Ángel Silva García, Especialista Principal del Grupo de Venta de Combustible Líquido.

“Aunque me formé aquí en el área de Economía  durante el servicio social, tuve la posibilidad de retornar a la empresa y alcancé la militancia del Partido. En medio de mi formación surgió una plaza en el área comercial y ne incorporé en el grupo de balance, posteriormente como especialista principal.

“Ser el jefe de personas que me formaron ha sido una experiencia única, y aún sigo aprendiendo de ellos. Actualmente estoy en la universidad estudiando para ser licenciado en contabilidad y finanzas, otro reto que me ha tocado llevar a la par del trabajo, y a distancia.

“Pero con el apoyo de los compañeros uno se crece; no se puede detener esta tarea en tiempos tan difíciles. Hay que asumir lo que nos impone la vida, a pesar de las trabas del bloqueo, y que por encima de todas esas circunstancias hemos sabido salir adelante y vamos a seguir haciéndolo”.

La Comercializadora Cupet Santiago de Cuba tiene una plantilla de 481 trabajadores y de ellos 131 son jóvenes. Entienden que aunque la experiencia es importante, formar y escuchar a las nuevas generaciones, creando oportunidades para su superación y que se involucren en posiciones decisivas, garantizará el futuro como entidad laboral que apuesta por la innovación y la eficiencia.