Cuando el visitante pasa por las casas da gusto ver los patios y jardines convertidos en lugares para producir alimentos, afirman pobladores en entrevista concedida para el telecentro TeleTurquino.
Las familias del territorio también se suman a la tarea y demuestran que se pueden alcanzar resultados favorables. Al comienzo de la campaña de frío contaban con varios semilleros de lechuga, ají, berenjena, col y otros cultivos.
Las iniciativas constituyen alternativa ante los elevados precios que dificultan adquirir los productos en los mercados y ferias.
La producción de alimentos es una tarea estratégica para Cuba; es imperativo poner a producir cada pedazo de tierra que esté ocioso, por pequeño que sea. En el surco donde está la mayor riqueza de la nación.