Cercana al centro histórico de la urbe indómita, en la intersección de las Calles San Francisco y Corona, se ubica la instalación en la que actualmente se retoma la repostería popular, bajo el liderazgo de esta fémina, socia única y fundadora de la empresa.

Pasteles de aro y tapados con guayaba, rollitos cubanos, brazos gitanos rellenos con mermelada, marquesitas, sopa borracha y polvorones, son algunos de los productos que por décadas se expendieron en este sitio y que regresan para el beneplácito del pueblo.

Significó la aspiración de que las nuevas generaciones continúen con la preferencia hacia los dulces de esta institución tan especial, por lo que han tratado de recopilar el arsenal de recetas de la repostería popular cubana, para con precios asequibles, ofrecerlas a los clientes en el horario desde las 08:00 hasta las 20:00 horas.

Lo que se pretende es mantener esa tradición, sin perder ninguno de los elementos de cubanía que siempre existieron en La Diana, dijo, por eso en esta feria queremos mostrar ese legado.

Respecto a sus intereses específicos en Expocaribe 2025, refirió la intención de establecer negocios con empresas chocolateras, de café, apícola, entre otras, en aras de garantizar la materia prima necesaria para elaborar sus productos, e incluso manifestó la posibilidad de insertar novedades a sus ofertas.