En una evaluación crítica se remarcó la necesidad de cumplir las metodologías de trabajo plasmadas en los documentos rectores partiendo de la planificación de cada acción, la redacción y adherencia al plan de temas de importancia para las entidades y empresas, así como las rendiciones de cuentas sistemáticas y las evaluaciones por parte de los funcionarios en cada nivel.
Para evaluar la política de cuadros debe contarse con la valoración de la comisión, con el fin de cumplirla y garantizar permanecia y calidad del trabajo en sus integrantes.
Sobre esta línea, se debe fomentar el trabajo con la cantera y la reserva, elevando el intercambio con las mismas para medir su preparación, nivel de satisfacción, compromiso y su futuro comportamiento ético y rendimiento. La preparación debe estar permeada por una capacitación profunda en la esfera donde se debe desempeñar.
Para el 2025 se proyecta continuar el trabajo para cumplir la máxima de mantener la unidad con las masas, con capacidad de movilizar, dialogar y ser resolutivos, elevar la sensibilidad política y humana, la responsabilidad, disciplina, exigencia y control, haciendo uso de la dirección colectiva para alcanzar las mejores soluciones a los problemas.
La Primera Secretaria, en las palabras finales, sintetizó como resultado del debate que este es un tema estratégico para el futuro del país y la preparación debe ser más profunda, partiendo del diagnóstico; asimismo, la actualización es clave en todo momento, al igual que el trabajo en equipo, también con la colaboración del Gobierno.