Así informó Jesús Antonio Vera Shelton, director general de la entidad, quien añadió que "hemos fortalecido renglones como los áridos, de manera especial con el polvo de piedra, las losas y las conexiones hidráulicas y sanitarias -que tienen como materia prima el barro-, y como extensor del cemento utilizamos el polvo de piedra y la cal, en cuatro de los nueve municipios de la provincia".
De acuerdo con especialistas de EPROMAC, las variantes han hecho posible la colocación de losas hidráulicas, resanes y repellos a las paredes, e incluso la confección de bloques de hormigón, en dependencia de la resistencia de la mezcla, previamente certificada.
No obstante, "las demandas, siempre crecientes, del Programa no se suplen dado el déficit de cemento, de combustibles y de la generación del Sistema Eléctrico Nacional, puesto que nuestro equipamiento –en parte modernizado a partir de proyectos con la Federación de Rusia-, depende de la misma", aseguró el directivo.
Con presencia en todos municipios santiagueros, esta empresa apela a la explotación de los recursos de cada territorio, en función de que la producción local sea sostenible y se constituya en la principal fuente para que, de los 189 renglones necesarios para construir una vivienda, "41 sean producidos con materias primas endógenas y otros 76 a partir del reciclaje", concluyó Vera Shelton.