La sustitución de importaciones es toda aquella producción de bienes materiales o de servicios que logrados nacionalmente evitan recurrir al mercado internacional para su adquisición, lo cual implicaría gastos en divisas frescas o apelar a créditos.
San Luis, por ejemplo, sustituye con la leche de vaca y de búfalo, la carne vacuna, de cerdo, el café, la miel de abeja, los frijoles y el maíz en grano seco, las producciones compradas en el exterior y ahorra al propio municipio miles de pesos anualmente.
Disminuyen importaciones también el gran cúmulo de innovaciones puestas en práctica en los diferentes talleres de reparación de maquinaria agrícola, ferroviaria o dedicada al transporte público.
La sustitución de importaciones aquí pone a prueba y desarrolla la capacidad creativa de técnicos y obreros, genera empleo y capacidades productivas, así como deja en el país recursos que antes salían al exterior, todo lo cual es clave en la actualización del modelo económico nacional.