Posteriormente el mandatario colocó una ofrenda floral, “en nombre del pueblo de Namibia”, ante el monumento que atesora las cenizas de Fidel Castro Ruz, quien fundó entrañables lazos de amistad entre las dos naciones y con Sam Nujoma, Líder Histórico de la nación subsahariana.
Al escribir en el libro de visitantes del camposanto, Nangolo Mbumba calificó el momento como muy emotivo para él y su familia y expresó su deseo de que el espíritu de los próceres cubanos siga inspirando a las generaciones venideras a fomentar el amor entre los dos pueblos y países.
Al concluir la visita oficial a la nación caribeña, el mandatario fue despedido en la pista del aeropuerto internacional Antonio Maceo por el vicegobernador de Santiago de Cuba, Waldis González Peinado.
Durante su estancia en Cuba, a Nangolo Mbumba le fue impuesta la Orden José Martí, máxima condecoración que otorga el Estado Cubano, y sostuvo conversaciones oficiales con el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
