A ochos años de sus honras fúnebres, presidieron el tributo en Santa Ifigenia, Beatriz Jhonson, primera secretaria del Partido Comunista de Cuba en la provincia, Manuel Falcón, Gobernador y las máximas autoridades de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y el Ministerio del Interior en Santiago de Cuba.
Flores blancas como símbolo de paz y pureza adornan el monumento funerario de Fidel, única tumba en el campo santo, que no tiene epitafio, fecha de nacimiento ni de muerte, porque el Comandante en Jefe vive en el corazón de los cubanos, y su ejemplo continúa haciendo los caminos de la Revolución.
Todo el pueblo de Cuba estuvo representado en los santiagueros, quienes en multitudinaria peregrinación por la avenida Patria, llegaron a Santa Ifigenia para reeditar el postrer tributo a Fidel cuando acompañaron sus cenizas el cuatro de diciembre de 2016.
El histórico líder había fallecido el 25 de noviembre a los 90 años de edad, legando a Cuba y al mundo su ideal de justicia social, que inspira a los movimientos sociales y personas de bien.