Las Avispas de Santiago de Cuba levantaron un partido que tenían cuesta arriba y llegaron a soñar con el triunfo, pero al final los Tigres avileños se encargaron de cortarle los aguijones y con marcador de 13 carreras por nueve, se llevaron un éxito que les garantiza el duelo particular ante los indómitos y los deja líderes en solitario de la 61 Serie Nacional de Béisbol.
Abundante ofensiva y muy mala defensa nos dejó el encuentro disputado este tarde en el Coloso de la Avenida de las Américas, donde lo montañeses sacaron el orgullo para poner en aprietos al bullpen de los muchachos de la tierra de la piña, pero a la postre se quedaron sin premio y fueron alcanzados por sus más cercanos perseguidores en la tabla de posiciones.
El juego comenzó con ribetes muy similares al de este martes, con la tropa del centro del país adelantándose en los primeros compases, gracias a un racimo de seis anotaciones que le fabricaron al abridor Pedro Agüero y a su sustituto Yosmel Garcés.
En un inacabable segundo inning (batearon 11 avileños), los muchachos de Yorelvis Charles abrieron con jonrón de Rubén Valdés y después ligaron cinco hits más que, combinados con una de las tres pifias de los “rojinegros” en el encuentro, se transformaron en las seis primeras carreras del encuentro.
Después de eso, las tensiones se calmaron y no fue hasta el quinto episodio que se volvió a activar la casilla de las anotaciones, con las tres primeras de los dueños de casa, todas ante el abridor de los Tigres, Luis Marrero.
Luego de dos outs, el receptor Harold Vázquez conectó un cuadrangular con un corredor en circulación. A esto le siguieron tres imparables consecutivos para que Francisco “Paqui” Martínez pisara la goma.
Sin embargo, los avileños reaccionaron al instante y Valdés volvió a ser decisivo. Esta vez encontró las bases llenas y con sencillo al jardín central trajo dos más para su equipo, que sumó otra más en el séptimo remolcada por Raúl González.
Así encaró “Santiago” el último tercio del encuentro, abajo por seis carreras y con tres oportunidades para cambiar la historia.
La remontada comenzó en el llamado “inning de la buena suerte”, ante los envíos de los relevistas Arnaldo Rodríguez y Yosvany Ávalos (a la postre ganador del juego).
Un boleto a Santiaguito Torres fue secundado por triple de Dasiel Sevila, quien a su vez fue impulsado por Yoelkis Guibert (se mantiene líder en este departamento, ahora con 54). Luego Adriel Labrada y Dennis Alá pegaron sendos cuadrangulares para acercar aún más a los indómitos.
Y en el octavo llegó lo que parecía imposible. Error de Raúl González, doblete de Santiaguito y hit de Sevila nivelaron el pizarrón a nueve anotaciones, para desatar la locura en el “Guillermón”.
Pero como reza el refrán: “La felicidad dura poco en casa del pobre”.
El relevista Jorge Luis Bravo permitió imparable de Alexander Jiménez en el inicio de la novena entrada y el mentor Eriberto Rosales echó mano a su caballo de mil batallas, Alberto Bisset, pero la jugada le salió mal.
Esta vez el veterano no fue efectivo y no pudo evitar que el internacional Yorbis Borroto le sacara la pelota del parque para bajarle los ánimos a los parciales santiagueros. Para remate Osvaldo Vázquez también pegó “bambinazo” de dos carreras (frente al relevista Yoandri Montero) para decretar el 13x9 definitivo.
Con este éxito, Ciego de Ávila se convirtió en el primero en llegar a las 35 victorias, al tiempo que Santiago de Cuba archivó su revés 27, que junto a las 28 victorias que acumula lo tienen ahora enrolado en un triple empate entre los lugares siete y nueve, con los elencos de Matanzas y Holguín, respectivamente.
Mañana se completará este duelo particular, ya ganado por los Tigres y donde las Avispas buscarán evitar el pase de escoba, y de paso no caerse de la zona de clasificación.
