Los trabajadores y las beneficiadas amasan el éxito con júbilo de la casita con capacidad para 20 pequeños de la primera infancia, los que desarrollan sus actividades en un local adaptado que quedó como nuevo y con muy buenas condiciones.
En conversación con la subdirectora general del internado Miralbis Falcón García, dijo: “Se materializa un sueño que beneficia a 20 trabajdores del centro. El fuerzo ha sido grande pero se logró lo que se previó; el apoyo fue de todos. “Hoy tenemos el personal competo para la casita, cuatro trabajadoras docentes, tres educadoras y un el equipo de servicio, con la colaboración, fundamentalmente del colectivo del circulo infantil Sol del Mañana, que nos atiende directamente por las experiencia que tienen en este tipo de actividad”.
"La Esperanza del Mundo" ya tiene a sus primeros moradores, quienes disponen de todos los medios para desarrollar su intelecto en esta etapa.
La casita infantil del internado Abel Santamaría se une a otras que ya funcionan en el territorio para paliar la gran demanda de capacidad para círculo infantil en Santiago de Cuba, y demuestra que cuando se quiere, se puede.