La afección, que consiste en un incremento anormal de la fuerza que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias, se asocia a enfermedades cardiovasculares, enfermedad renal crónica, pérdida de la visión, demencia, aneurisma y otras complicaciones severas.
Se estima que el 25.5% de los habitantes de Santiago de Cuba han sido diagnosticados como hipertensos, aunque a decir de los especialistas, el dato podría ser inferior a la cantidad real de personas aquejadas por HTA, pues no siempre se detecta en los primeros meses de evolución.
La carencia de medicamentos, ocasionada por el recrudecimiento del bloqueo estadounidense contra la Isla –que obstaculiza la adquisición de materias primas para la industria farmacéutica-, dificulta el acceso de los hipertensos a fármacos de alta eficacia para controlar la tensión arterial. Y esto, claro está, preocupa a quienes ven escasear productos indispensables para el cuidado de su salud.
En este contexto, la medicina natural y tradicional se convierte en una alternativa a la que debería prestarse mayor atención. Máxime cuando los productos de este tipo suelen tener menor probabilidad de ocasionar reacción adversa o dependencia en quienes los consumen. Además, son menos costosos y de fácil preparación.
Sobre métodos tradicionales para controlar la HTA, Sierra Maestra conversó con Iris García López, profesora de Farmacología de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Según la experta, la infusión de hojas de naranja agria es una de las mejores opciones para la sustitución de la aspirina, que suele utilizarse en dosis bajas a la hora de acostarse porque reduce significativamente los niveles de presión arterial en pacientes con HTA leve.
Asimismo, las infusiones de otras plantas como el carpintero o la hoja de guanábana, son muy efectivas y fáciles de encontrar en nuestras comunidades.
A juicio de la especialista, son muy recomendables productos fitoterapéuticos como la Caña santa extracto fluido (20 gotas en medio vaso de agua tres veces al día), Ajo tintura (20 gotas en medio vaso de agua de dos a tres veces al día), y Albahaca tintura. Estos, explicó, también pueden sustituirse con infusiones de caña santa y de albahaca. También ayuda al tratamiento el jarabe de cebolla (una cucharada tres veces al día).
La sabiduría popular es rica en opciones para mantener controlada la tensión arterial, pero como es bien conocido, también existen medidas higiénico-dietéticas muy eficaces contra este padecimiento.
Una de las más recomendadas por los especialistas es la reducción del peso corporal en personas con sobrepeso u obesidad, y esto se logra con una dieta abundante de frutas, vegetales y alimentos bajos en calorías, a lo que deben sumarse hábitos como la práctica frecuente de actividad física moderada e intensa. En este sentido, es muy útil la realización de ejercicios como caminar rápido al menos 30 minutos al día varias veces por semana.
La disminución de la ingestión de sal y la supresión de bebidas alcohólicas, tabaco y otras drogas (si se consumen habitualmente) también son vitales para mantener en controlada la presión arterial.
Cuidar de nuestra salud debe ser tarea prioritaria en nuestra cotidianidad, principalmente si ya tenemos algún padecimiento o enfermedad asociada. Dedicar tiempo a nuestro cuerpo y mente permitirá llevar una vida más saludable. El bienestar, la alegría de vivir, también son consecuencias de nuestra conducta ante el desafío de mantener a raya las enfermedades. No olvidemos que ante las carencias, la medicina verde, esos conocimientos que aprendimos de nuestros abuelos, pueden ser una gran alternativa frente a la hipertensión.