Este grupo de profesionales que hoy desempeñan cargos importantes en diferentes esferas de la enseñanza, la producción y los servicios de nuestro país; fueron prestigiados por la presencia de una representación de profesores del otrora Instituto Superior Minero Metalúrgico, hoy Universidad de Moa “Antonio Núñez Rodríguez”.
Con un programa muy intenso en solo 48 horas, se visitaron lugares importantes y emblemáticos de la ciudad; se hizo una actividad de intercambio y confraternización en la que hubo derroche de alegría, satisfacción, nostalgias y sobre todo mucho orgullo de haber sido una generación que se creció ante las dificultades del periodo en el que fueron estudiantes universitarios entre los años 1990 y 1995.
Se volvieron a sentir como aquellos jóvenes, casi adolescentes que cuando llegaron a los 18 años de edad, en aquella lejana tierra, desprovistos de todo, tuvieron la osadía de crecer y alcanzar el título de Ingenieros Metalúrgicos.
No faltaron las muestras de amor, respeto, empatía, sacrificio… quedaron muchas huellas de amor y cariño sincero. ¿La mayor alegría? Volverse a abrazar, compartir sentimientos, dar testimonio de historias pasadas y presentes, hablar del trabajo, la familia, de metas aun por alcanzar.
Con un abrazo gigante, terminó un añorado encuentro, un sueño hecho realidad, lleno de emociones y con muchos deseos de volver a repetir.
¡Gracias Santiago!