Hoy arranca una semana intensa con un debate a tres (y no a cuatro como debió ser) el miércoles en TVE con el actual jefe del Ejecutivo, el socialista Pedro Sánchez, la candidata del movimiento de izquierdas Sumar, Yolanda Díaz, y el líder del ultraderechista partido Vox, Santiago Abascal.
Una relativa tregua de Sánchez se debe a que está inmerso este lunes y mañana martes en la Cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en Bruselas, en su calidad de presidente de turno del bloque comunitario.
La ausencia del gobernante español en su plaza pudiera ser un hándicap o un cierto alivio, en momentos en que las encuestas ratifican al conservador Partido Popular (PP) como amplio favorito para dominar las elecciones y volver al Palacio de la Moncloa.
Intercambio de acusaciones, lonas gigantes colocadas en Madrid y otras ciudades de España y tonos muy subidos con foco en los votantes, agriaron la campaña hasta niveles insólitos, deslizándose con frecuencia las medias verdades o datos falsos para desbarrar del contrario.
Muchos tertulianos de los principales espacios informativos de los medios locales ya no ocultan sus preferencias. Con tímidos amagos, son muy evidentes en espacios como TVE, Antena 3, cadenas radiales Cope y Onda Cero, y escritos como El Mundo y La Razón, en los cuales la inclinación por el PP es bastante clara.
Se ha instalado en la campaña las dudas sembradas por Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, refrendadas de forma más incisiva por Abascal, de los votos por correo, a la usanza de Estados Unidos cuando Donald Trump lo hizo para descalificar a los demócratas de Joe Biden.
De tal forma, los medios señalados no sólo cuestionan la validez del servicio que ofrece Correos de España, con más de dos millones y medio de sufragios a tramitar de cara a los comicios, sino también culpan a Pedro Sánchez por la supuesta ineficacia de su labor.
Feijóo, incluso, ofreció pagas extras a los carteros si llegara a ganar los comicios, para asegurarse de que los votos lleguen a su destino en tiempo y forma.
En cualquier caso, los sondeos coinciden en que el PP conquistará la mayoría de los escaños parlamentarios. Necesitaría 176 para asumir en solitario el Gobierno, algo muy en duda en estos momentos.
Ese es su punto flaco, la necesidad imperiosa de pactar con Vox, lo cual llevaría al Consejo de Ministros a la ultraderecha, algo que ya ocurre en Ayuntamientos y Comunidades Autónomas.