El Olímpico maniató a los yumurinos y no permitió anotaciones en seis entradas completas. Sus compañeros habían abierto el marcador en el
segundo capítulo, gracias al jit impulsor del refuerzo Leonardo Montero. Un wild pitch a Luis Veranes, con hombres en las almohadillas y un mal tiro a primera de Andris Pérez, derivaron en dos carreras más de Santiago, en las piernas de Euclides Pérez y el propio Montero.
El abridor matancero, Denis Quesada, concedió vías libres a Pérez y Francisco Martínez en el cuarto inning; entonces, un rolling impulsor de
Veranes trajo al segundo hasta home. En la parte baja séptimo, el relevo de Alain Sánchez terminó por descontrolarse y un doble de Yordan Manduley extendió la ventaja.
Reynaldo Álvarez mantuvo el dominio a la tanda de Matanzas, desde que subió al box, en esa misma estrada, pero la lechada se perdió de manera
dramática en la novena, con Jaime Pelegrín en la lomita. Había dos outs en la pizarra cuando apareció un error de Euclides Pérez y los Cocodrilos enseñaron los dientes: cuatro inatrapables y un boleto fueron los detonantes de sus tres carreras.
Carlos Santana tomó la bola y sacó el out 27 para terminar con las angustias de los aficionados, apuntándose el juego salvado. El veterano Betancourt resultó el vencedor y Denis Quesada cargó con el revés. De esta manera, la subserie particular marcha 2-1, favorable a los representantes de la Atenas de Cuba.