“La donación nos ayudará mucho para realizar un mejor trabajo con los jóvenes talentos que tenemos en la academia y así poder mantenernos entre las mejores provincias del país, pues actualmente somos el segundo lugar integral a nivel nacional”, expresó el jefe de la cátedra, Rudy Cabrales Castillo.
El profesor mostró su satisfacción por recibir los nuevo judogis, ya que: “Nos llega en un momento importante, porque teníamos déficit de estas indumentarias, las cuales son vitales para la preparación de los atletas. Ahora podremos trabajar en la técnica del kumi con mayor efectividad, así como en los agarres y en los controles, entre otras”.
Lo cierto es que el judogi no es solo una vestimenta, para el judoca, es casi como una armadura. “Es imprescindible para nosotros, yo diría que sin un buen judogi no se puede practicar al judo correctamente. Sin duda, nuestro equipo estará mucho mejor preparado gracias a este donativo”, comentó Wendy de la Caridad Martínez Uribe, de la división -63 kilogramos.
Son acciones como estas las que crean puentes de amistad y solidaridad indisolubles, que además ayudarán a los futuros campeones de ese arte marcial en el territorio indómito a mantener a Santiago de Cuba como una potencia en la práctica del judo.