Leonardo Herrera, director técnico de los Diablos Rojos, explicó que el staff incentiva al plantel y realiza una preparación mixta, con cargas balanceadas, para evitar las sobrecargas musculares. Otra alternativa han sido los topes internos y con jóvenes de la Eide, que hacen los
entrenamientos más amenos.

El conjunto conserva su tradicional esquema de cinco frecuencias semanales; Randy Revé, capitán de la escuadra, comentó que incluso pueden aumentar ya hay disposición plena de los atletas.

“Espero con ansias volver a sentir ese plus que aportan los cánticos del graderío, que hacen de nuestra localía una ventaja”, dijo a Sierra Maestra.

Como parte de los entrenamientos, también se disputan encuentros contra la escuadra femenina.

Dentro del programa previsto para acondicionar a
las Diablas Rojas, se realizará la Copa Edisney Danger Cascaret, un homenaje al entrenador de porteras fallecido en este año. De acuerdo con el Comisionado Provincial, Ariel Speck, en esta lid participarán todas las categorías en la rama femenina, las cuales se impusieron en sus
respectivos torneos domésticos.

Antes del parón, el equipo mayor contabilizaba cuatro victorias y un empate, para un total de 13 puntos, encabezando la Liga Nacional, empatado con Camagüey, pero con un partido disputado más. Estos resultados demuestran el buen trabajo que se viene realizando con las futbolistas rojinegras.

Recientemente, cuatro jugadoras indómitas representaron a la selección nacional en sus enfrentamientos amistosos contra Nicaragua “una alegría enorme, ya que se lo han ganado con sacrificio y buen fútbol. El llamado de la selección es un motor impulsor, genera deseos de superarse y una competencia sana dentro del vestuario”, valoró la central Rosalis Moya Rodríguez.

La Tierra Caliente tiene un futuro promisorio en esta disciplina, en el caso de los Diablos Rojos, el promedio de edad es de 22 años. Leonardo Herrera destacó la entrega de su nueva camada, aunque la mayoría aún no ha sumado minutos en ligas nacionales, ya demostraron su valía en la
Supercopa conquistada frente a Cienfuegos.

Al presente, aprovechan la pausa competitiva para engrasar los engranajes y equilibrar esa juventud con la experiencia de algunas figuras.

El equipo está más que listo para la voz de arranque, “las metas son las mismas: clasificar al Torneo de Clausura y una vez en esas instancias,
valorando el momento del combinado, se propondrán otras para el final de temporada” afirmó el estratega.