Como se conoce, dos fechas enmarcan la Jornada: el 10 de octubre, efeméride del inicio de las guerras por la independencia de Cuba del colonialismo español, y el 20 de octubre, que marca el día en que en 1868, se cantó por primera vez en Bayamo, la marcha compuesta por Perucho Figueredo devenida Himno Nacional.
Por eso hoy 10 de octubre, varios colectivos de Patrimonio Cultural, encabezados como siempre por el del Museo Emilio Bacardí, se reunieron junto al pueblo santiaguero en el Parquecito Serrano.
En dicha plaza, una de las más populares de la ciudad, y que habitualmente se utiliza para este acto, hay un monumento erigido a la memoria de Juan Gualberto Gómez, Miguel Figueroa y Rafael M. de Labra, todos luchadores contra la esclavitud, y como parte de este conjunto escultórico, una mujer y un hombre tributan su hijo a la libertad.
En un extremo del parque, en el Callejón del Carmen, hay una estatua del célebre músico cubano, santiaguero por demás, Miguel Matamoros con su guitarra.
En ese entorno se desarrolló el acto de Patrimonio Cultural, en el que una de sus especialistas, Nairobis Clavel Venero, argumentó cómo en la institución las actividades se concentran en la jornada “Octubre de 1868: 155 años de gloria”.
Jorge Patterson, actor del grupo Teatral Macubá, declamó una poesía de Nicolás Guillén, y el grupo folclórico “Folkloyuma” deleitó con sus cantos.
Raulicer García Hierrezuelo, director provincial de Cultura, junto a directivos de Patrimonio Cultural y José Armando Carrillo, director del Museo Emilio Bacardí, asistieron a la celebración.
En otro momento, el M.Sc. Pedro Manuel Castro Monterrey, investigador de la Oficina de la Historiadora de la Ciudad, habló sobre la raza y su devenir a lo largo de las luchas independentistas.
En el propio Parque Serrano, y también como es habitual en estas conmemoraciones, el Museo Emilio Bacardí organizó una muestra titulada “Rompiendo cadenas”, con exponentes de la etapa esclavista en Cuba.