Según informó a Sierra Maestra Héctor Sánchez Caraballo, especialista de la Dirección Comercial de la Empresa Eléctrica Provincial, durante el año 2023, un promedio de 3 605 clientes consumieron más de 500 kwh lo que representa el 1% del total de clientes residenciales en el territorio.

Entre todos estos acumulan el 4,6 % del consumo de energía y el 17.8 % del importe total de la provincia; hay que tener en cuenta, explicó el especialista, que estos datos fluctúan en dependencia de los meses de verano o invierno, pues la influencia del calor determina el mayor o menor consumo de corriente en los hogares.

Otro asunto que exige del control riguroso por parte de los funcionarios designados con ese fin es el fraude, un factor cuyos indicadores implican a 2 797 violadores de la ley, cuya detección permitió recuperar unos 5 761.7 MWh.

En estos casos, aclaró Sánchez Caraballo, las medidas que se aplican a los clientes que se detectan cometiendo fraude son una multa de 500 pesos y corte del servicio eléctrico; multa de 1000 pesos a los reincidentes y corte del servicio eléctrico, además del cobro retroactivo hasta un año del consumo e importe dejado de facturar, concluyó el especialista.

Lo más importante en esta cruzada contra las ilegalidades en el sector eléctrico, es que los clientes asuman su responsabilidad social de consumir la energía de forma sostenible y con apego a la legalidad, dando pasos hacia la deseada cultura económica que transversaliza todos los procesos sociales.

Para que lleguen a buen puerto cuantas medidas estatales se establezcan para ahorrar portadores energéticos, y forzar menos las ya obsoletas tecnologías de las plantas generadoras, es necesario el trabajo conjunto de muchas personas desde diferentes roles sociales, pues no basta pagar más, sino gastar menos.