El resultado de la prueba, permitirá afrontar la llamada zafra chica, lo que está condicionado por la disponibilidad de lubricantes para el transporte automotor y ferroviario.
La producción de Dos Rios será determinante para suplir el azúcar de la canasta familiar normada del año que se avecina. El plan, asciende a 18 212 toneladas, precisó Henry Domínguez Busto, director de Informática, Comunicación y Análisis de la entidad.
La materia prima para el proceso fabril será tanto de sus estructuras como de las pertenecientes a las EAA Julio Antonio Mella (Mella), América Libre (Contramaestre) y Paquito Rosales (San Luis), esta última elaborará meladura y, si las condiciones lo permiten, se incorporará en el mes de febrero a la producción de azúcar.
La industria palmera, que no pudo cumplir lo pactado para la zafra precedente -aunque fue ligeramente superior a lo producido en la 2021-2022-, también ha de garantizar la autosuficiencia energética y el necesario aporte, con sus respectivos turbogeneradores, al Sistema Eléctrico Nacional.
Las mieles, aguardientes y otros derivados de la caña de azúcar se encuentran, además, entre lo que esta empresa agroindustrial debe elaborar, haciendo un uso eficiente de sus recursos humanos, materiales y financieros; de manera especial del combustible que el país destina al efecto.