Como informó a Granma el doctor Ramón Pérez, del total de organismos tropicales previstos, 14 deben desarrollarse en la zona oceánica del Atlántico, cuatro en el mar Caribe, y otros dos en el golfo de México.
Según indicó el doctor Pérez Suárez, las probabilidades de que se origine e intensifique al menos un huracán en el Caribe son muy altas, con un 85 %, mientras que es del 70 % para el caso de que uno de procedencia atlántica penetre en el mar Caribe.
Precisó que el peligro de que Cuba sea afectada por al menos un huracán es muy elevado, con un 80 % de probabilidad.
Refirió que las condiciones oceánicas y atmosféricas sobre el Atlántico y el mar Caribe serán muy favorables para el desarrollo de la actividad ciclónica, tomando en cuenta los valores muy altos de la temperatura superficial del mar, y el observado debilitamiento del evento El Niño/Oscilación del Sur (enos), que debe finalizar en mayo, para posteriormente, establecer condiciones neutrales.
Se une a lo anterior la alta probabilidad de que un nuevo evento, La Niña/Oscilación del Sur (Aenos), surja y entre en pleno desarrollo a partir de julio o agosto.