Y es que Jardines decidió utilizar lo que mejor sabe hacer: pintar, para reflejar en sus obras un tema casi tan antiguo como el hombre sobre La Tierra: la migración. No la de un país a otro sino el movimiento dentro de una misma nación.

“Cada año, más de 20 millones de personas deben abandonar su hogar y trasladarse a otros puntos de su propio país debido a los peligros que causan la creciente intensidad y frecuencia de eventos climáticos extremos como lluvias inusualmente fuertes, sequías prolongadas, desertificación, degradación ambiental, ciclones…”, apunta el catálogo de “Consecuencias”.

La Lic. Wendy Flores Reyes, especialista principal de la pinacoteca adscripta a la Oficina del Conservador de la Ciudad, dijo las palabras inaugurales y señaló:

“La temática medioambiental ha sido motivo de inspiración y preocupación para muchos artistas de la plástica en nuestra ciudad, a lo largo de los años pero en los tiempos actuales lo es aún más, debido al incremento de acciones y procesos que provocan alteraciones en el equilibrio de la naturaleza”, y añadió:

“Uno de los santiagueros que revela especial interés en estos temas es el pintor Víctor Manuel Jardines García, quien logra plasmar sus inquietudes de forma con esta exposición personal… En esta selección de obras puede apreciarse la representación tanto de fenómenos naturales como de las múltiples consecuencias que traen consigo situaciones de contaminación, calentamiento global y otros hechos que conllevan al cambio climático y este a su vez puede llegar a la migración ecológica, punto esencial en la muestra”.

Luego intervino el propio artista: “He tratado de tocar el tema de la migración dentro del mismo país; migración en que las personas se desplazan de un lugar a otro, por los problemas ecológicos, la degradación del ambiente, el calentamiento global… Y quiero dar con mis obras, un mensaje”.

Jardines utiliza códigos como el abstraccionismo, la figuración, con el objetivo de llegar a más espectadores y que su obra sea un tanto más “legible”.

A la muestra asistieron Raulicer García Hierrezuelo, director provincial de Cultura; Darcia Reyes y Luisa María Ramírez, presidenta y vicepresidenta del Consejo Provincial de las Artes Plásticas; artistas de la manifestación; Alejandro Castañeda, profesor de la Universidad de Oriente; estudiantes, público en general y familiares del pintor. Dos alumnos le dedicaron poemas al autor y a su obra.

Minutos después de quedar abierta la exhibición, Víctor Manuel conversó con Sierra Maestra:

“Soy oriundo de Los Moreiros, en la Sierra Cristal, zona del municipio de Segundo Frente; también viví en Sabanilla y en Mayarí Arriba. Después me trasladé a Santiago de Cuba y aquí estudié en cursos nocturnos en la Academia de Artes Plásticas José Joaquín Tejada. Y me gradué en 1986.

“De ahí para acá trabajé como instructor de arte; en el Museo Emilio Bacardí, y ya luego me hice artista independiente, vinculado al Fondo Cubano de Bienes Culturales.

“Esta, ´Consecuencias´, es una de las muestras que yo hago tocando el tema de la migración por problemas ecológicos dentro de la misma ciudad. Le pongo un ejemplo:

“Aquí en Santiago de Cuba, cuando apenas se hablaba de ecología hubo una migración allá por los años 20 del pasado siglo, cuando la gente acomodada, que tenía dinero se fueron del centro de la ciudad huyéndole al bullicio propio de una urbe muy poblada, y construyeron lo que es Vista Alegre. Esa es una migración ecológica, por el ruido. En Cuba hay muchas muestras de estos movimientos: buscando tierras que produzcan más… Todo esto lo he querido tocar en la exposición”.

Buena parte de la familia del pintor lo acompañó en la apertura de la exposición

A sus 66 años, Víctor Manuel Jardines García es un artista consolidado y es también, una muestra de un tipo de migración que no es ecológica sino más bien de conveniencia artística. Esta no daña en absoluto. Es beneficiosa para el creador y para quienes disfrutamos de su arte que puede ser exhibido en cualquier escenario, incluido aquel de donde procede el autor: Mayarí Arriba, Sabanilla, Los Moreiros…