Competir al más alto nivel y alcanzar preseas no será el único incentivo para los deportistas, seguramente muchos tratarán de asegurar las marcas de clasificación a los próximos Juegos Olímpicos de París 2024.

Buena parte de las pruebas de Atletismo ha elevado la varilla con respecto a lo que se pedía para asistir a Tokio 2020. No obstante, la mitad de los participantes en la cita “bajo los cinco aros” dependerá de esos registros, la otra, accederá mediante el ranking global en la etapa establecida, según reseña el sitio oficial de los Juegos Olímpicos.

Así, el Mundial de Budapest 2023 realza el atractivo que acompaña a este tipo de eventos y brinda la oportunidad perfecta para que los contendientes se luzcan en el campo y la pista de la capital húngara.

La escuadra antillana está compuesta por 20 atletas, con reflectores para los especialistas del triple salto: Cristian Nápoles y Lázaro Martínez, entre los hombres, así como Leyanis Pérez y Liadagmis Povea en la lid femenina.

Pérez es la de mejor año, recientemente registró 14.98 metros (m) para llevarse el subtítulo en los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador. Povea consiguió el bronce con 14.85 m, en una competencia donde se batieron con la plusmarquista venezolana Yulimar Rojas (15.16 m), quien ya cuenta con boleto a la venidera cita olímpica.

El pertiguista Eduardo Nápoles, el saltador de longitud Alejandro Parada, Zurian Hechavarría (400 m con vallas) y Luis Enrique Zayas, saltador de altura, son los santiagueros convocados al máximo foro del Atletismo. Los tres últimos vienen de lograr preseas en San Salvador.

El comisionado nacional, Rolando Charroo, declaró a Jit que Cuba no lleva figuras favoritas en sus disciplinas. “Se trata de un grupo mayoritariamente joven con que estamos trabajando fuerte para potenciarlo de cara al futuro.

“En medio de todo eso resultaría demasiado optimista decir que vamos por una u otra medalla. Potencialidades hay en algunos eventos, como en el triple salto para uno y otro sexo, pero serán pruebas difíciles de mucho nivel”, apuntó el directivo.

En un escenario como este se encuentra calidad en todos los rivales y de manera general, el Atletismo cubano ha estado afectado por distintas cuestiones, llevarse solo una presea de Budapest, de cualquier color, mejoraría el desempeño en el XVIII Campeonato Mundial de 2022, celebrado en Eugene.

Apenas un año nos separa del certamen en suelo estadounidense, donde Cuba terminó sin medallas, veremos qué depara la competición en Hungría, la campaña de las triplistas las pone -al menos- en posición de discutir.

Lo cierto es que hoy comienzan jornadas trepidantes para el universo deportivo, propicias para las grandes gestas y los récords. Dato interesante: por primera vez en estos campeonatos, los entrenadores resultarán premiados con los mismos metales que recibirán sus discípulos.

En conferencia de prensa realizada por los organizadores trascendió que su decoración alude a la sede con imágenes de la Estatua de la Libertad de esa ciudad y del estadio donde se desarrollarán las justas.

Las ceremonias de entrega también tendrán novedades, ya que se harán en la “Plaza de las Medallas”, un sitio preparado para estos acontecimientos. Allí los ganadores disfrutarán de su éxito y podrán intercambiar con el público, esperemos que alguno de nuestros representantes pueda vivir ese momento.