José Ramón Monteagudo Ruiz, integrante del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y Primer Secretario del PCC en el territorio santiaguero, y Manuel Falcón Hernández, vicegobernador, encabezaron la asistencia al espectáculo.
Autoridades del Partido y el Gobierno asistieron a la gala
Durante cerca de dos horas, la velada dirigida por Eliades Quesada con la conducción de Kenia Campuzano y Dayron Chang, devino síntesis de 11 días de actividades en comunidades, plazas, barrios e instituciones de la cultura, en esta urbe que la Unesco en 2021 certificó como Ciudad Creativa en la Música.
Grupos y solistas del catálogo de la Empresa de la Música y los Espectáculos Miguel Matamoros y de las Artes Escénicas y la Brigada José Martí de instructores de arte formaron el elenco.
Minutos antes del inicio, Eliades Quesada declaró al periódico Sierra Maestra: “Queremos enviar desde esta Santiago de Cuba rebelde ayer, hospitalaria hoy y heroica siempre, un mensaje de solidaridad al sufrido pueblo de Palestina; reiterar que condenamos en los términos más enérgicos, el genocidio al que está sometido ese pueblo también heroico”.
La obra Trance, a cargo de “Kokoyé”
“Santiago en el corazón de Cuba” fue el título de la gala, celebrada a pocos metros del obelisco que permanentemente rinde tributo a la memoria de Perucho Figueredo, autor del Himno Nacional cubano.
Como se informó previamente, en el país las actividades de la Jornada estuvieron consagradas a los 155 años del Himno y del inicio de las guerras por la independencia; también, al aniversario 65 del triunfo de la Revolución; a los 220 años del natalicio del poeta santiaguero José María Heredia y Heredia, y a los 70 del alegato de autodefensa de Fidel Castro, en el juicio por los hechos del 26 de julio de 1953 en el Cuartel Moncada.
De la música y la danza en la clausura de la Jornada, se encargaron el Coro Madrigalista, bajo la dirección del maestro Ariel Rodríguez León, con dos temas: “Rompiendo la rutina” y “A Bayamo en coche”; el Dúo Las Bayamesa cantó Frutas del Caney, de Félix Benjamín Caignet, y Mujer bayamesa, de Sindo Garay, un tema que cumple 105 años; la compañía Teatro de la Danza del Caribe “hizo” la obra “Yerba buena; el actor Maikel Eduardo declamó el poema Un largo caimán verde, de Nicolás Guillén; y el Ballet Folclórico “Kokoyé” llevó al escenario la obra Trance.
El elenco incluyó, además, a la solista vocal Laritza Breto, miembro de la Brigada José Martí, de instructores de arte, que este 20 de octubre celebró sus primeros 19 años, y la agrupación de danza Sabor Añejo, con la coreografía Estampa cubana.
El cierre con puro sabor tradicional a estilo de Los Guanches
Hubo un segmento de la noche, para los homenajes a las agrupaciones que cumplen aniversarios cerrados, por ejemplo, en el escenario de la Plaza de Marte se llevaron flores y diplomas, Teatro de la Danza del Caribe y su directora Bárbara Ramos (35 años de la agrupación y de vida artística de ella); el conjunto folclórico Kokoyé (35 años); el septeto Los Guanches (30 años); Dinza y su Sonora Santiaguera (25 años), y la excepcional Berta Armiñán Linares.
El Septeto Los Guanches, con Armandito Machado al frente, tuvo la responsabilidad del cierre del espectáculo, o sea de correr las cortinas de esta extensa y variada jornada en marcha desde el pasado 10 de octubre para dignificar aun más la cubanía.
