Conseguirlo ha sido una proeza, y no por ello poco disfrutable. El haber contado con la mayor cantidad de personas bailando, simultáneamente, en ruedas de casino, así como la mayor cantidad de ruedas a la vez, fue un empeño del proyecto internacional Retomando el son, Bailando casino, liderado por el promotor cultural Luis Llamo Castillo, con quien conversó Granma, para abundar en detalles sobre el hecho, cuyo acto central tuvo lugar en la plaza La Piragua, frente al Malecón capitalino.

Durante nueve minutos, en toda la Isla se realizaron, a la vez, 142 ruedas de casino, con más de 2 900 bailadores en todo el país, informó en su página de Facebook el Consejo Nacional de Casas de Cultura que, junto al Ministerio de Cultura y otras instituciones, ha acompañado el evento.

–¿Cuándo nace el proyecto?

–El proyecto surge en el año 1995, en Bayamo, para contribuir a la salvaguarda del son cubano, y tiene como objetivo principal que todos los soneros del mundo den continuidad a esta música, y la lleven a personas de todas las edades. En estos momentos trabajamos para llevar la experiencia a los 168 municipios del país.

–¿Esperaban este resultado?

–Sí, llevamos un año trabajando para lograrlo, y sabemos que lo podemos hacer todavía mejor. Ahora estamos enfrascados en romper, en noviembre, el récord Guinness, con la mayor rueda de casino, que lo queremos tener al lado de este que acabamos de lograr.

–¿Quién gana con este hermoso suceso cultural?

–Con esto gana la cultura cubana, gana el pueblo, porque realmente en lo sucedido están nuestras esencias, nuestras raíces, nuestra identidad, que son valores profundos. Y ha habido un humanismo en todos estos casineros, una gran camaradería propia de los cubanos. Creo que hemos enviado al mundo un mensaje de paz, de amor, de confraternidad. Muchas personas estaban esperando que Cuba se proyectara de esta manera.

«Nosotros estamos satisfechos porque Cuba ha podido demostrar, ante el mundo, que ningún elemento foráneo puede apagar nuestra cultura, y esta es una respuesta contundente a la descolonización cultural. Creo que la Unesco puede tenerlo en cuenta para la declaratoria del son como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad».

El Presidente Díaz Canel, en su cuenta en X, felicitó a los casineros y consideró el récord mundial y nacional de bailes populares y deportivos cubanos, como «muestra de la cultura, identidad y alegría de nuestro pueblo».