Así lo explicó a Sierra Maestra Alfredo Cintra Guerra, responsable del departamento provincial de Vigilancia y lucha antivectorial, quien destacó que instituciones como Salud Pública y Labiofam asumen el tratamiento a las viviendas e instituciones afectadas, respectivamente.
Según el directivo, el municipio con mayor infestación es Santiago de Cuba, y hacia este se dirigen los mayores esfuerzos. La unidad que dirige afronta las labores de control etimológico en el sector residencial, con la aplicación del insecticida hasta en tres ocasiones, a intervalos de siete días. Además, los operarios tienen la misión de informar a los moradores cómo realizar las acciones de higienizacion necesarias para contribuir al exterminio de los hemípteros.
Además, se mantiene la vigilancia en otros territorios que han presentado reportes aislados y en los que se actúa para suprimir los focos y evitar la propagación.
El experto señaló que se priorizan las labores de control etimológico en instituciones educacionales y de Salud, así como otros centros con gran afluencia de personas.
Las chinches, cuyo nombre científico es Cimex lectularius, se nutren de sangre caliente de humanos y otros animales. En su etapa adulta es de color marrón rojizo, de forma oval y aplastada, sin alas. Pueden vivir hasta un año y medio sin alimentarse. Y a veces son difíciles de detectar hasta que transcurre un mes o más tiempo desde el inicio de la infestación.