Sobre estos conversamos con José Gonzalo Borrero Sotomayor, director provincial de dicha entidad, quien nos permitió conocer un poco más sobre las acciones que los ocupa, así como sus principales carencias y dificultades, las que repercuten directamente en el sentir y estado de opinión de la población santiaguera.

El directivo destacó que actualmente la principal problemática se encuentra en los servicios necrológicos, desde su punto de vista, uno de los más complejos y a los que hay que brindarles una atención priorizada.

“La basura puede que, por diferentes razones demoremos en recogerla algunos días -y no digo que no sea importante y mucho menos le resto- pero la persona que fallece evidentemente no puede esperar, y ahora mismo presentamos dificultades.

“La situación hoy es compleja por ejemplo, a partir del parque de equipos, carente de neumáticos y baterías. De 30 vehículos que disponemos solo están en funcionamiento unos 10, y para el municipio cabecera solo tres, aunque poco a poco debemos ir mejorando, a partir de gestiones que hemos realizado de conjunto con la Delegación de transporte, que nos permitirán en pocos días mejorar la situación”, afirmó.

Otro tema importante son los enterramientos y la capacidad de los cementerios, asunto que muchas veces provocan disgustos en las familias que no poseen bóveda propia, pues no siempre es posible realizarlos en el lugar donde desean y eso depende de la capacidad que obviamente no siempre es la misma.

En cuanto a la demora o no de la recogida de fallecidos en el hogar, Borrero afirmó que además de la poca disponibilidad de vehículos, la falta de conocimiento de los trámites legales por parte de la población lacera dicho servicio.

“A veces el médico realiza el certificado de defunción, pero la familia debe poner el cuño en el policlínico y no lo hacen; vienen a la funeraria, el certificado tiene errores o no está completo, tienen que volver a buscar al médico y si este estaba de guardia o ya se fue, entonces el proceso se alarga…También hay personas a las que se les queda el certificado en la casa, no hay un reporte de la familia, evidentemente la funeraria no tiene cómo entender que hay un fallecido en la vivienda, entre otras dificultades que se presentan”, destacó.

Otro tema que hoy provoca disgustos es el incinerador de Santiago de Cuba, paralizado hace ya algunos meses y que sin dudas afecta la calidad de los servicios de la empresa, pero sobre todas las cosas, hace aún más engorroso el difícil momento de algunas familias luego del fallecimiento de un ser querido.

En este sentido Borrero Sotomayor explicó que en un primer momento la pantalla del crematorio- que es como la computadora del equipo- tuvo una avería y aunque ha intentado solucionarlo ha sido imposible. Solo los creadores, que en este caso son españoles, pueden arreglarlo.

“Estamos a la espera de que vengan a actualizar el sistema, pues nosotros como clientes lo que tenemos es una copia del programa que no nos permite operar dentro del mismo ni modificarlo. Una vez se le dé solución a este asunto, estaremos en condiciones de brindar el servicio pues el resto del crematorio está en óptimas condiciones”, afirmó.

Según aseveró el directivo, mientras tanto, los santiagueros dependemos de las provincias vecinas como Guantánamo y Holguín, pero incide también la aprobación de ellos, la disponibilidad que tengan. Es un reclamo de nuestro pueblo y una necesidad a satisfacer por parte de la entidad, a partir de que genera calidad en el servicio.

Estas y otras quejas o dificultades vulneran la opinión y el sentir de la población santiaguera con respecto a la calidad de los Servicios Comunales; cierto es que si para la empresa es difícil enfrentar situaciones como las antes mencionadas, peor aún debe ser para las familias que en uno de los más tristes momentos de sus vidas, deban asumir y comprender además estas complejidades, muchas de las cuales pudieran mejorarse con un poco más de organización y comunicación.

Con gran sentido de pertenencia, el directivo afirmó que la entidad apuesta por lograr durante el 2023 estabilizar lo más posible el sistema, y así elevar la satisfacción de los clientes, en acciones tan importantes como las mencionadas anteriormente.