Tal y como ocurrió el sábado, en el “Guillermón Moncada” se vivió un partido tenso, definido por pequeños detalles y donde los dos conjuntos no escatimaron en usar a sus mejores relevistas para llevarse el éxito.

Comenzó delante la visita tras explotar rápidamente al abridor montañés, Edialbert Valentín, al que le fabricaron tres anotaciones en una entrada y un tercio de labor.

A su rescate vino Yosmel Garcés, quien estuvo mucho mejor que Valentín, a pesar de permitir la cuarta de los occidentales, pero eso fue todo lo que le hicieron, hasta que le cedió su lugar al veterano Alberto Bisset una vez concluido el quinto capítulo.

Por otra parte, la ofensiva de los “rojinegros” se lo tomó con calma y a cuenta gotas comenzó la remontada ante el abridor de los Huracanes, Mailon Cruz.

En el segundo capítulo ligaron tres hits consecutivos para anotar la primera. Un episodio después llegó otra por cuadrangular de Santiaguito Torres. En el cuarto sacaron del box a Mailon luego de conectarle par de dobletes y hacerle otra y la cuarta anotación, que sirvió para empatar el marcador, llegó en el quinto, por cohete remolcador de Dasiel Sevila ante el relevista Assiel Reyes.

El manager de los mayabequenses Michael González no lo pensó dos veces y trajo a Vega para que hiciera un relevo mucho más largo de lo normal y lo cierto es que la jugada le salió a las mil maravillas.

El serpentinero completó el partido tras espaciar cuatro imparables, regalar tres bases por bolas (dos en la parte baja del noveno para ponerle suspenso al final), pero ponchó a cinco (incluido uno ante Marcos Fonseca para liquidar el encuentro) y se apuntó su séptimo triunfo de la temporada.

En tanto, sus compañeros lo apoyaron con una anotación en el séptimo y otra en el noveno, todas ante Bisset (cargó con su sexto revés de la lid) y traídas por el primer bate Martínez para darle a los Huracanes su sonrisa número 30 de la campaña y mantenerse en el tercer puesto de la tabla, a uno y medio de la cima.

Algo sí me gustaría resaltar antes de cerrar esta crónica. Es inconcebible que tanto árbitros como el alto mando de las Avispas no tengan claridad con la reglamentación del video-arbitraje.

Lo ocurrido en la parte baja del séptimo inning, cuando las Avispas reclamaron una acción y los jueces la desestimaron, con el alegato de que los indómitos habían gastado sus opciones (cuando no era así), dejó muy mal paradas a ambas partes, pues si bien uno demostró no dominar la regla, la otra tampoco enseñó estar muy clara que digamos. Inaceptable que pasen estas cosas.

De todas formas, para Santiago de Cuba esta fue su derrota 25, con 28 ganados, por lo que se mantiene séptimo, a cinco juegos completos de la punta y con dos de holgura con respecto a la línea roja de la clasificación.

El próximo martes, en el propio “Guillermón Moncada” recibirán al colíder del torneo, Tigres de Ciego de Ávila (33-20), con el que tienen la subserie particular igualada a una victoria.